La Numantina
Hostal La Numantina: Donde el encanto y la pasión se encuentran en el corazón de Logroño.
Con cada paso que se da en Logroño, el peregrino se adentra en una ciudad llena de historia y tradición, donde los siglos se entrelazan en cada rincón. Las estrechas calles del Casco Antiguo susurran historias ancestrales, mientras los monumentos y plazas emanan el esplendor de un pasado glorioso.
El peregrino se acerca a Logroño, descendiendo del Monte Cantabria, que hoy en día se erige como un mirador excepcional sobre la ciudad. El origen de su nombre, ‘illo-gro-nio’, nos habla de aquel vado en expresión celta y pronombre latino. En la cima de esta montaña perduran restos arqueológicos prerromanos, como hogares circulares y cerámicas elaboradas a mano que nos transportan al siglo II a.C., un legado histórico que nos conecta con el pueblo de los Berones.
El barrio de San Antonio recibe al caminante y lo guía hacia el Puente de Piedra, mientras sus ojos se fijan en las torres que se alzan majestuosas en la fachada norte del Casco Antiguo. Pero antes de cruzar el puente, la curiosidad del peregrino es despertada por los fielatos. Estas antiguas casas de arbitrios, construidas en el siglo XIX para cobrar tributos a aquellos que deseaban acceder a la ciudad, se han convertido en la Oficina de Información al Peregrino.
Pero más allá de su riqueza histórica, Logroño es un lugar de encuentro, donde peregrinos de diferentes nacionalidades y culturas convergen en un abrazo fraternal. Aquí, las barreras se desvanecen y las diferencias se diluyen en la experiencia común de recorrer el mismo sendero hacia la venerada Compostela.
El Camino de Santiago ha dejado su huella imborrable en Logroño, un legado que trasciende el tiempo y perdura en la hospitalidad de sus habitantes. La ciudad se ha transformado en un oasis de descanso, un lugar donde el peregrino encuentra refugio, alimentos reconfortantes y palabras de aliento para continuar su travesía.
Logroño, con su encanto único, se convierte en un hito en el camino, en un punto de inflexión en la jornada del peregrino. Es aquí donde las pisadas cansadas encuentran reposo y las almas sedientas encuentran consuelo. En cada rincón de esta ciudad, el espíritu del Camino se hace presente, recordándonos que el verdadero viaje no solo es hacia un destino físico, sino también hacia nuestro interior.
El peregrino, al partir de Logroño, lleva consigo el legado de hospitalidad y generosidad de sus habitantes. Continúa su camino con renovadas fuerzas.
Hostal La Numantina: Donde el encanto y la pasión se encuentran en el corazón de Logroño.
En el Hostal La Numantina, disfruta de servicios como ascensor, WiFi gratis, parking privado (con suplemento), aceptamos mascotas, limpieza diaria, recepción 24 horas, consigna de equipajes, baños privados y opción de camas supletorias y cuna.
Donde la historia se mezcla con la gastronomía, el encanto de sus calles y la calidez de su gente. Descubre la belleza de esta ciudad llena de sorpresas y deja que te enamore.
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